Los bebés se encuentran en pleno crecimiento, por eso necesitan una alimentación adecuada a sus necesidades. Todos los nutrientes son importantes para contribuir al desarrollo físico y mental, pero hay algunos que resultan totalmente esenciales durante esta etapa temprana de sus vidas. En esta ocasión nos referimos a las proteínas, un nutriente que se encuentra de manera natural en la leche materna. Pero, ¿sabes qué beneficios aportan exactamente al crecimiento de los niños? ¿Dónde podemos obtenerlas una vez pasado el periodo de lactancia?
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¿Cuántas proteínas necesitan los niños?
Antes de adentrarnos en los beneficios que este nutriente reporta a los niños, debemos hablar de la cantidad que necesitan. Nuestras necesidades como adultos difieren mucho de las de los más pequeños: para que lo tengas en cuenta, nosotros necesitamos aproximadamente 0,8 g de proteínas por kg de peso corporal cada día.
Pero en el caso de los niños, quienes se encuentran en plena fase de crecimiento, necesitan aumentar esta cantidad. La Asociación Española de Pediatría informa de que el cálculo de la ingesta proteica del lactante se sitúa en unos 2,04 gramos por kilo de peso al día durante los tres primeros meses y 1,73 gramos por kilo de peso al día de los tres a los seis meses.
Por otro lado, también es necesario tener presente que un exceso de proteínas puede tener inconvenientes. Las proteínas de origen animal contienen sustancias como ácidos grasos saturados, que podrían favorecer la aparición de colesterol. Por eso es importante administrárselas de manera correcta: durante la lactancia materna el peque realizará las tomas a demanda. Si le damos una fórmula de continuación (a partir de los seis meses) es importante seguir las recomendaciones que el producto nos indica. Hay fórmulas concretas que aportan al bebé los nutrientes que necesita, como la leche infantil NAN 2 de Nestlé, cuya fórmula contiene OPTIPRO®, un proceso exclusivo que aporta la calidad adecuada de proteínas para el bebé.
Más adelante, cuando comencemos con la alimentación complementaria, los niños obtendrán proteínas de otras fuentes como la carne, el pescado o los huevos. La mejor manera de controlar la cantidad de este nutriente será llevar una alimentación variada y equilibrada: las proteínas deben suponer, aproximadamente, el 10-15% de la dieta.
Beneficios de las proteínas
Ahora que ya tenemos claro qué cantidades necesitan los bebés, es hora de conocer qué función cumplen exactamente las proteínas. Ya hemos dicho que, en general, contribuyen al crecimiento de los peques, ¿pero cómo lo hacen?
- Las proteínas contribuyen a la formación de la masa muscular.
- Son necesarias como constituyente esencial de ciertas hormonas.
- Son un constituyente esencial de las células del cuerpo.
- Ayudan a transportar el oxígeno en la sangre.
- Contribuyen a mantener un nivel normal de azúcar en sangre.
Como hemos comentado antes, existen fórmulas infantiles de continuación indicadas para bebés desde los seis meses que les aportan nutrientes que necesitan para este periodo. NAN 2 de Nestlé contiene proteínas OPTIPRO®, 13 vitaminas esenciales, inmunonutrientes protectores, calcio y hierro, entre otros nutrientes. Se trata de una buena alternativa para comenzar el periodo de alimentación complementaria y asegurarnos así de que nuestro bebé está tomando nutrientes que necesita.
Consulta con tu profesional de la salud.
NOTA IMPORTANTE: La lactancia materna es la mejor alimentación para el bebé, ya que la leche materna le proporciona una dieta equilibrada ideal y le protege frente a las enfermedades,aportando además muchos beneficios no nutricionales para el bebé y la madre. Te recomendamos que consultes con un profesional de la salud cuando vayas a decidir sobre el tipo de alimentación de tu bebé.
También deberías solicitar consejo al profesional de la salud para prepararte para la lactancia materna y para el mantenimiento de la misma. Si te decides por la lactancia materna, es importante que realices una dieta equilibrada y saludable. Los preparados para lactantes están destinados para reemplazar a la leche materna cuando las madres han decidido no dar el pecho o si, por algún motivo, no pueden darlo. La decisión de no amamantar o de introducir una alimentación parcial con biberón reducirá la cantidad de leche materna. Si, por cualquier motivo, decides no dar el pecho, recuerda que será difícil cambiar tu decisión.
El uso de preparados para lactantes tiene implicaciones sociales y económicas que se deben considerar. Los preparados para lactantes deberán prepararse, utilizarse y almacenarse siempre tal como se indica en la etiqueta para evitar riesgos para la salud del bebé.
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