Lo último en coloración para las más atrevidas es el Rainbow Hair. O lo que es lo mismo, llenar tu melena de distintas coloraciones. Desde los tonos pasteles y más suaves, hasta los más intensos y estridentes, ¡el límite está en tu imaginación! Si durante las dos últimas temporadas, en la que los colores candy eran los reyes del cabello, no te atreviste, este es tu momento.
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Para llevarlo a cabo, déjate aconsejar por un profesional ya que este tipo de trabajos técnicos no son tan fáciles como parecen. El primer paso será el de decolorar tu melena para que el tinte penetre mejor en ella y el color sea más vivo. Una vez la tengas aclarada, es el momento de empezar a aplicar tus tonos preferidos.
Los tintes se componen por pigmentos y matices. El pigmento es el encargado de dar el color y el matiz, es quien da el reflejo. Para conseguir este efecto arcoíris, deberás optar por tonalidades que carecen del primero, también llamadas tonalidades fantasía. Mantener esta coloración en tu cabello como el primer día es más complicado, y tendrás que volver a la peluquería con más frecuencia que si fuera un tinte "normal", puesto que su intensidad se pierde mucho más rápido.
Si no quieres lanzarte a la piscina y prefieres ser más cauta, siempre puedes comprar tizas de colores para el cabello y probarlo tú misma en casa, ya que se van con un solo lavado. De esta manera puedes ver los que mejor combinan con tu pelo y con tu piel para que sea más fácil decidirte por unos en concreto.
¿Qué te parece la tendencia rainbow?
