La justicia de género es un tema que hoy en día sigue más que vigente. Por desgracia, todavía existen grandes desafíos cuando vemos las cifras: las mujeres representan un 70% de las personas pobres del planeta. Las mujeres cobran menos que los hombres, según un estudio realizado por Oxfam Intermón se necesitarían 75 años para lograr la paridad salarial. Las mujeres constituyen el 65% de las mujeres analfabetas en el mundo. Las mujeres solo ocupan un 14% de los escaños parlamentarios en el mundo. La violencia de género es la principal causa de muerte entre las mujeres de 15 a 44 años, por delante del cáncer, la malaria, los accidentes de tráfico y las guerras.
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Datos que realmente ponen los pelos de punta y que nos hacen cuestionarnos, ¿qué se está haciendo mal? La pregunta es compleja y las respuestas son infinitas pero existen muchas mujeres que luchan por cambiar esta situación como es el caso de las "Avanzadoras". Ellas intentan abrir el camino a otras mujeres, romper techos de cristal y acabar con todas las barreras para hacer frente a la violencia, la ausencia de libertad y de derechos. Charifa Beja, cambió su vida a partir del día que sus jefes la echaron por exigirles ayuda para llevar a su prima al hospital tras un accidente. Luchó porque miles de mujeres rurales y sin estudios como ella pudieran aspirar a una vida mejor; hoy en día es presidenta de la Asociación de Mujeres Lideresas del Sector de Frutos Rojos integrada en RADEV y dedicada al desarrollo solidario. María Eugenia Cruz tuvo que abandonar su hogar a consecuencia de un conflicto armado y el trato forzoso que ello conlleva; actualmente desde la organización Mujer, sigue mis pasos denuncia, acompaña a víctimas y les da apoyo frente a las instituciones. María José Díaz Reyes es activista desde los 9 años cuando descubrió un mundo sin violencia gracias al movimiento infantil Luis Alfonso Velásquez Flores, algo muy distinto a lo que vivía en su barrio a diario plagado de inseguridad, alcoholismo y prostitución infantil; hoy en día es directora ejecutiva de Asodel, donde trabaja con gente joven y ejerce como educadora contra los estereotipos de género en Nicaragua. Estos son tan solo algunos ejemplos de mujeres "Avanzadoras" que dedican su tiempo a trabajar diariamente para que los derechos de las mujeres se cumplan aplicando su visión de género en todos los programas de desarrollo, acción humanitaria, comercio justo y sensibilización.
Un trabajo que a alguna de ellas le ha llevado a renunciar el formar su propia familia para convertirse en activista, algo que de lo que no se arrepiente: "Mi vida cambió hace 6 años gracias a Oxfam Intermón, y gracias al director de esta organización en Colombia. Yo, Jineth Bedoya, periodista, me atreví a contar al mundo que el 25 de mayo del 2000 fui secuestrada, torturada y violada por mis secuestradores. Ese día no solo decidí seguir siendo periodista sino que me volví activista y me puse como propósito y meta cambiar no solamente mi vida sino la vida de miles de mujeres en mi país. Hoy con un orgullo muy grande puedo decir que valió la pena. Tuve que sacrificar mi vida personal, renunciar a tener hijos, a tener un hogar… Pero hoy tengo miles de hijas que son esas mujeres que en Colombia están empoderando a otras mujeres". Este es el testimonio de Jineth Bedoya, que lejos de esconderse por el miedo sacó todas sus fuerzas para dedicarse a tiempo completo a esta causa. Es subeditora de El Tiempo, principal diario de Colombia, ha publicado seis libros, entre ellos Diario de un combate (2005), Te hablo desde la prisión (2010) y Blanco neutralizado (2013) y su trabajo le ha merecido varios reconocimientos como el Premio Mundial al Coraje Periodístico e incluso, en 2012 Michelle Obama y Hilary Clinton le otorgaron, en la Casa Blanca, el Premio Internacional a las Mujeres Coraje.
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Un homenaje a las "Avanzadoras"
Todos los proyectos que se realizan para ayudar este tipo de iniciativas son pocos. Dar voz a esas mujeres es lo que necesitan y de eso se ha encargado, Sole Giménez, directora musical del proyecto “Avanzadoras: 12 canciones homenaje a mujeres que avanzan y hacen avanzar”, durante casi dos años de trabajo de la mano de Osfam Intermón y Mediaset. Un discolibro que rinde homenaje a todas estas valientes que viven por y para defender nuestros derechos en todo el mundo. "Sus historias se amplifican (...). Un libro que cuenta que nos acerca a sus vidas para entenderlas mejor. Escritoras, periodistas y cantantes que han demostrado lo comprometidas que se puede ser como mujeres", explicaba Sole a los medios. Ana Belén, Estrella Morente, Leonor Watling, Lamari de Chambao, María Dolores Pradera, María de Medeiros, Maika Makovski, La Shica, Rosa León, Pilar Jurado y la propia Sole Giménez así como Elvira Lindo, Rosa Montero, Judith Mascó, Carmen Sarmiento o Julia Otero, entre muchas otras, son las artistas que han participado en este discolibro y que se han implicado por completo en el proyecto. Una pequeña joya que puede significar el fin de la tortura y es que: "Un euro, dos euros, cinco euros… son la esperanza para muchas mujeres".
