Hace unos días se publicó la noticia de que Selena Gomez se dejó ver en público por las calles de Tennesse, pero para su desgracia fue porque la cantante venía del hospital, donde le habían descubierto que «la ansiedad, los ataques de pánico y la depresión pueden ser efectos secundarios de lupus, que pueden presentar sus propios desafíos".
Al parecer, y según publica la revista US Weekly, la joven estaría luchando además contra ciertos problemas psiquiátricos producidos por los efectos secundarios del tratamiento del lupus que la hizo retirarse de los escenarios hace unas semanas.
A causa de esta situación, Gómez, que canceló las fechas de la gira Revival Tour el pasado agosto para poder lidiar con su enfermedad, ha decidido ingresar voluntariamente en un centro de rehabilitación donde le traten los problemas de ansiedad, depresión y ataques de pánico.
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"Selena está luchando contra el lupus, pero este descanso es para concentrarse en su salud mental", explicaba una fuente cercana a la texana al diario UsWeekly, que añadía que de no tratarse podría llegar "a lugares muy oscuros".
No es la primera vez que es ingresada en una clínica, ya que hace dos años también lucho por esta enfermedad. Tal y como confirma una fuente cercana a la cantante en la citada revista, "Selena se está tratando el lupus, pero este descanso es para centrarse en su salud mental. Se encuentra en un centro privado y tranquilo, pero con un tratamiento superintenso".
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Hace tres días la cantante fue vista comiendo en un restaurante de Tennesse, ciudad donde se encuentra el centro según asegura el Dailimayl. Testigos afirman que Selena iba vestida muy sencilla, con ropa cómoda y ancha, mostrando una actitud agradable y accediendo a hacerse fotos con sus fans.
