Cuando Juego de tronos anunció quiénes interpretarían a los personajes que muchos ya se habían imaginado en sus cabezas gracias a los libros, nadie conocía a Emilia Clarke. Ella se pondría en la piel de uno de los personajes más importantes de esta serie que ahora mantiene a todo el mundo en vilo: Daenerys. Ahora, siete años después, es una de las mujeres más deseadas, buscada y mejor pagadas. Este domingo despide la séptima temporada del gran proyecto de su vida y ya está preparada para grabar el final de la historia.
Según las últimas estimaciones de lo que cobran todos los actores de la ficción americana, Emilia Clarke se posiciona entre los primeros puestos con su medio millón de dólares por episodio. Eso haría un total de 3,5 millones de dólares esta temporada (sólo por la serie). Además de esta producción, la actriz tiene muchos más proyectos profesionales.
Nacida en Londres hace 30 años, recién cumplidos el pasado mes de mayo, la actriz estudió arte dramático y trabajó como agente de bienes raíces para poder pagar el apartamento en el que vivía mientras estudiaba. Tuvo que hacerse la enferma para poder ir a la audición de Juego de tronos. En ese momento trabajaba en un catering y tuvo que buscar en Wikipedia de qué iba la serie porque no tenía ni idea.
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Además de la actuación, a la actriz le encanta la música. Adora cantar y, de hecho, lo hace muy bien. Al menos, así lo demostró en el film Dom Hemingway, en el que trabajó junto a Jude Law, y en la obra de teatro que protagonizó, Breakfast at Tiffany's, donde interpretó canciones de jazz, blues y cabaret. También sabe tocar la flauta, el piano y la guitarra.
Cuesta creer que una belleza así haya recibido alguna vez cargadas, pero parece que nadie escapa al bullying. Cuando era chica, sus compañeros de clase se burlaban de sus "ridículas cejas". Según confesó la actriz, la culpable fue su madre, que le repetía constantemente una estricta regla: "No consumas drogas, no tengas sexo y no te toques las cejas".
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La moda es otro punto clave para toda celebritie y Clarke no es la excepción. Por eso eligió como estilista a una de las mujeres más influyentes de la actuación: Kate Young, la misma profesional que ha aconsejado a las actrices Sienna Miller, Dakota Johnson, Selena Gomez y Natalie Portman.
