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Una transparencia andante, así es como podemos definir a la actriz, modelo y cantante albanesa Bleona Qereti en la gala de los American Music Awards, celebrada esta semana en el teatro Nokia de Los Ángeles. En su intento de emular a la cantante Rihanna, Bleona asistió semidesnuda, ataviada únicamente con una malla larga que llegaba hasta sus tobillos y curiosamente cubria sus brazos, unas pezoneras plateadas y un escueto tanga. ¿De verdad hay que llegar a estos extremos para que los focos se centren en ti? ¿Dónde queda el arte de la seducción, del sugerir sin llegar a mostrar?
A sus 29 años, ha grabado ocho álbumes y ha lanzado 13 sencillos. Ha tenido la gran suerte de poder trabajar con productores de la talla de Timbaland, Rodney Jerkins o el ganador de un Grammy, David Foster. Sin embargo, su música no es muy conocida en Sudamérica. Bleona habla y canta en inglés, albanés, italiano y alemán; además toca el violín. Lo que no llegamos entender es cómo esta mujer tan polifacética ha recurrido a un look de este tipo en un evento, cuando tiene experiencia y cualidades que la avalan de sobra para encontrar su lugar en el mundo de la música.
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¿Objetivo Rihanna?
Los comentarios se extendieron como la pólvora en las redes sociales a partir de la aparición de Bleona en la alfombra roja el pasado domingo. Y es que pocos pasaron por alto el intento de la cantante albanesa de parecerse a la sexy cantante de Barbados. En cuanto vieron su look, todos recordaron el vestido transparente de cristales de Swarovsky que lució Rihanna en los premios CFDA de este mismo año. ¿Casualidad? La mayoría no lo cree.
