Selva, agua clara y rutas cortas: un destino cercano promete desconexión real sin cruzar océanos ni vaciar la cartera.
Muchos miran a destinos exóticos buscando selvas y ríos verdes. Pocos saben que, a dos pasos, España guarda una isla que deslumbra con bosques húmedos y playas de **aguas cristalinas**. Es un refugio perfecto para una escapada breve con sabor tropical y comodidades cercanas.
La selva que parece el Amazonas está más cerca de lo que crees
La respuesta está en **La Gomera**, una isla volcánica que conserva un corazón verde y un litoral transparente. Su tamaño permite recorrerla sin prisas. Sus valles empinados y barrancos profundos protegen un ecosistema Atlántico único que sorprende al primer paseo.
21.000 habitantes, 20 kilómetros de norte a sur y un **ferry de 50 minutos desde Tenerife**: una “selva” accesible.
Este paisaje recuerda al **Amazonas** por su sensación de humedad, su vegetación densa y la presencia constante de brumas que se enredan en los árboles. La diferencia está en la escala y en la seguridad de moverse con infraestructuras modernas, alojamientos pequeños y carreteras que comunican miradores, playas y caseríos.
Un parque que respira verde y agua
El corazón de la isla lo marca el **Parque Nacional de Garajonay**, un bosque milenario de laurisilva que se mantiene gracias a los vientos alisios y a la lluvia horizontal. Caminas entre troncos tapizados de musgo, pasas túneles vegetales y escuchas el goteo constante que alimenta fuentes y nacientes.
**Garajonay** es Patrimonio Mundial desde 1986 y símbolo vivo de la laurisilva, un bosque relicto que casi desapareció en Europa.
En los altos, los senderos se internan en un mosaico de brezos, laureles y helechos gigantes. En los barrancos, la humedad se concentra y crea corredores verdes que desembocan en playas y charcos de agua clara. El contraste es inmediato: del bosque cerrado a la costa luminosa en menos de una hora.
Playas de aguas cristalinas para una escapada tranquila
La cara marina de La Gomera ofrece calas resguardadas y charcos naturales con visibilidad sorprendente. La arena suele ser oscura por su origen volcánico, pero el agua es limpia y transparente, ideal para nadar con calma, hacer snorkel o descansar sin masificaciones.
- Valle Gran Rey: ambiente sereno, atardeceres famosos y charcos como el **Charco del Conde**, perfectos para familias.
- Playa de La Caleta (Hermigua): agua límpida junto a acantilados verdes; los días de calma regalan un baño inolvidable.
- Playa de Santiago: puerto abrigado, agua clara y oferta de restaurantes a pie de mar.
- Alojera: cala recogida con sabor rural y mar turquesa cuando el viento respeta.
- Playa del Inglés (Valle Gran Rey): paisaje magnético; conviene prudencia por corrientes y oleaje.
La combinación de **bosque húmedo** y **playas transparentes** crea una experiencia tropical sin salir de España.
Cómo llegar y cuánto puedes gastar
La logística es sencilla. Puedes volar a **Tenerife** y cruzar en **ferry** rápido, o tomar un vuelo interinsular directo. En la isla, los tiempos son cortos, las carreteras son panorámicas y los miradores abundan.
| Trayecto | Duración | Precio orientativo | Frecuencia |
|---|---|---|---|
| Ferry Tenerife (Los Cristianos) – La Gomera (San Sebastián) | 50–60 min | 35–45 € por trayecto (peatón) | Varias salidas al día |
| Vuelo interinsular | 30–40 min | 40–90 € por trayecto | Diario |
| San Sebastián – Valle Gran Rey (carretera) | 70–90 min | — | Coches y guaguas regulares |
| Alquiler de coche en la isla | — | 30–45 € al día | En puerto y aeropuerto |
La apuesta por esta ruta acorta tiempos y reduce costes frente a un viaje transoceánico. Un puente largo basta para saborear bosque, costa y pueblos sin prisas.
Reserva de la biosfera, tradiciones vivas y gastronomía
La Gomera es **Reserva de la Biosfera** desde 2012 por su alta diversidad y su excelente estado de conservación. En sus riscos pervive el **lagarto gigante de La Gomera**, emblemático y amenazado. En sus laderas se encadenan terrazas agrícolas, palmerales y caseríos que conservan una identidad marcada.
Entre las tradiciones, destaca el **silbo gomero**, lenguaje silbado reconocido por la UNESCO como patrimonio inmaterial, usado para comunicarse de barranco a barranco. En varias localidades se programan demostraciones que asombran al visitante.
La mesa suma argumentos: **almogrote** (pasta de queso curado con mojo), **miel de palma** elaborada a partir de la savia de la palmera canaria, **gofio** en potajes y postres, y pescados frescos de costa. La oferta se concentra en pequeños restaurantes familiares que miran al mar.
Rutas y miradores que no fallan
- Sendero de El Cedro: laurisilva profunda, nieblas fotogénicas y cascadas según temporada.
- Alto de Garajonay: punto más alto, vistas de 360° y, con suerte, Teide en horizonte.
- Mirador de Abrante (Agulo): plataforma de vidrio y acantilado rojo sobre el pueblo.
- Valle Gran Rey: terrazas agrícolas, casas blancas y un litoral amable para el baño.
Consejos prácticos para una escapada sin sobresaltos
La isla tiene microclimas. Lleva chaqueta ligera y chubasquero para el bosque, además de crema solar para la costa. Calzado con suela adherente mejora la experiencia en senderos húmedos. Agua y pequeñas provisiones evitan contratiempos lejos de los núcleos.
Respeta la señalización del **Parque Nacional de Garajonay**. No salgas de los trazados ni recojas plantas. Si viajas con menores, el **Charco del Conde** ofrece un baño más seguro. Ante oleaje o mar de fondo, evita zonas expuestas y consulta a socorristas cuando estén presentes.
Si buscas silencio, reserva alojamientos en caseríos interiores. Si prefieres acceso fácil al mar, elige Valle Gran Rey o Playa de Santiago. Los fines de semana largo conviene reservar con antelación.
Comparativa rápida: un vuelo peninsular–Canarias emite mucho menos CO₂ por pasajero que un transoceánico. El ahorro de tiempo también es notable.
Idea de plan de 3 días
- Día 1: llegada a **San Sebastián**, paseo histórico y baño en Playa de San Sebastián al atardecer.
- Día 2: **Garajonay** por El Cedro, comida en Agulo y mirador de Abrante; tarde en **La Caleta** si el mar está tranquilo.
- Día 3: costa suroeste en **Valle Gran Rey** y **Charco del Conde**; regreso en ferry al anochecer.
Datos útiles y un extra para los curiosos
La isla cuenta con aeropuerto desde 1999 y red de guaguas que conecta los valles. Varias empresas organizan salidas para avistar delfines y calderones con protocolos de avistamiento responsable. El mejor periodo para combinaciones de bosque y mar suele ser primavera y otoño, con menos calima y temperaturas suaves.
Para estimar tu presupuesto, calcula transporte (vuelos más ferry), 2–3 noches de alojamiento en casa rural u hotel pequeño, coche de alquiler si quieres libertad y comidas en restaurantes locales. Una pareja puede ajustar un fin de semana largo desde unas cifras moderadas si reserva con antelación.



¡Qué descubrimiento! No sabía que La Gomera combinaba laurisilva, playas de agua cristalina y el silbo gomero. Lo de Garajonay Patrimonio Mundial me ha ganado. Ferri de 50 minutos y 21.000 vecinos: planazo para un puente. Definitvamente va a mi lista 🙂