Una puerta de horno con vetas mates y grasa reseca arruina cualquier cocina. No hace falta frotar sin parar ni gastar mucho.
La solución más compartida del momento usa tres piezas baratas y una mezcla casera. Quita la capa dura en minutos y protege el vidrio.
Por qué el cristal del horno se vuelve opaco
El calor convierte salpicaduras en grasa polimerizada. Se adhiere al cristal del horno y se oscurece. Los limpiadores fuertes aceleran, pero pueden dejar velos y olores. Un método mecánico suave, más un desengrasante doméstico, corta el problema de raíz sin dañar juntas ni esmaltes.
Objetivo: levantar la costra exterior con control, ablandar lo que queda y retirar residuos sin rayar el vidrio ni las gomas.
El método de tres piezas que está arrasando
Funciona porque combina acción física y química ligera. Se aplica en la parte interior acristalada y en la franja inferior donde más se acumula aceite.
Qué necesitas
- Raspador de cuchilla fina (tipo vitrocerámica). Úsalo siempre inclinado.
- Estropajo metálico fino o fibra no abrasiva para vidrio. Nunca sobre acero inoxidable.
- Pulverizador casero: 60 % vinagre de alcohol, 40 % agua y 1 cucharadita de detergente.
- Paño de microfibra, guantes y buena ventilación.
Receta rápida: 6 partes de vinagre + 4 de agua + una cucharadita de lavavajillas por litro. Agita y pulveriza.
Pasos, minuto a minuto
- Desconecta el horno y espera a que el vidrio esté frío. Retira migas con un paño seco.
- Pulveriza la mezcla. Deja actuar 10 a 15 minutos para ablandar la grasa.
- Con el raspador a 30–45 grados, pasa trazos amplios y suaves. Prioriza las zonas más oscuras.
- Repite la pulverización y frota con estropajo metálico fino en círculos cortos. Sin presionar en exceso.
- Seca con microfibra. Si persisten velos, una segunda pasada ligera suele bastar.
Claves de seguridad: cuchilla inclinada, presión moderada y pruebas previas en una esquina. Nada de movimientos bruscos.
Resultados y tiempos realistas
En un vidrio con suciedad media, el brillo vuelve en 12 a 18 minutos. Si hay costras viejas, añade un ciclo extra de pulverización y raspado. El método no deja perfumes. El vinagre neutraliza olores y el detergente emulsiona aceites para que el paño los arrastre.
Qué evitar para no estropear la puerta
- No mezcles lejía y vinagre. Genera gases peligrosos.
- No uses lana de acero gruesa. Puede rayar el vidrio templado.
- No pases cuchilla sobre acero inoxidable ni marcos pintados.
- No fuerces las juntas de goma. Se extraen y limpian aparte con la misma mezcla, sin cuchilla.
Si no tienes raspador: dos alternativas que funcionan
Pasta de bicarbonato y vapor
- Monta una pasta densa con bicarbonato de sodio y agua tibia.
- Extiende sobre la mancha, coloca una bandeja con agua caliente dentro y cierra 10 minutos (horno apagado).
- Retira con paño y termina con la mezcla de vinagre en spray para eliminar el velo.
Compresas de papel y detergente
- Empapa papel de cocina con la solución de vinagre y cubre el cristal.
- Deja actuar 20 minutos. Levanta el papel con la suciedad adherida.
- Seca y pule en seco con microfibra.
Coste, riesgos y mantenimiento
| Opción | Eficacia en grasa reseca | Coste estimado | Riesgo de rayado | Olor residual |
|---|---|---|---|---|
| Raspador + vinagre | Alta | Bajo | Bajo si se inclina | Mínimo |
| Bicarbonato + vapor | Media | Bajo | Nulo | Mínimo |
| Limpiador comercial fuerte | Alta | Medio | Bajo | Medio |
Una rutina de 5 minutos semanal evita costras: spray, paño y secado. El brillo se conserva y el esfuerzo cae en picado.
Cómo limpiar la puerta por dentro sin desmontarla
Muchas puertas tienen un pequeño tornillo o pestaña inferior que permite retirar la goma. Al liberarla, el borde del cristal queda accesible. Pulveriza la mezcla en una espátula con paño enrollado y pásala por la ranura. Repite hasta que el paño salga limpio. Vuelve a encajar la junta sin estirar.
Errores comunes que alargan la tarea
- Intentar quitar todo en una pasada. La primera capa siempre es la más dura.
- Frotar en seco. La película necesita humectación para desprenderse.
- Usar presión en vertical. La cuchilla debe deslizar, no morder.
Plan de prevención para cocinas con mucho uso
Coloca una bandeja recogegrasas en la parrilla inferior cuando cocines carnes o quesos. Abre la puerta dos dedos tras el uso para ventilar el vapor y reducir el velo. Pasa una microfibra con una gota de detergente cuando el cristal aún esté tibio, siempre sin exceder los 50 °C.
Cuándo repetir la limpieza profunda
Si cocinas a diario, un repaso quincenal mantiene el vidrio impecable. Si usas el horno de forma ocasional, basta una vez al mes. Si aparecen manchas iridiscentes, aplica el ciclo corto del método de tres piezas y seca bien para evitar halos.
Si ves gotas doradas después de asar, actúa en el día. Frescas salen con una sola pasada; secas requieren dos.
Información útil para ir más allá
El vinagre funciona por su acidez moderada, que rompe la unión entre grasa y vidrio. El detergente encapsula la grasa en micelas y el agua la arrastra. La cuchilla despega la capa polimerizada sin rayar si el ángulo es correcto. Este equilibrio permite resultados rápidos sin dañar el templado del cristal.
Si tienes niños o mascotas, prioriza la mezcla casera y ventila durante 10 minutos. En cocinas abiertas, un purificador con carbón activo reduce el olor ácido. Para modelos con doble acristalamiento, consulta el manual antes de desmontar la puerta. Algunas marcas ofrecen kits con espátulas finas y guías para acceder al espacio intermedio sin perder la garantía.


