Por eso, este día surgió como una ocasión idónea para evaluar a nivel mundial si esta libertad se cumple en todos los países, para defender la independencia ideológica que todo medio tiene derecho a tener y, sobre todo, para denunciar e informar a los ciudadanos sobre las violaciones a la libertad de prensa. Además, cada año se otorga el Premio Mundial de Libertad de Prensa, que este año ha recaído sobre Eynulla Fatullayev, periodista azerbaiyano y activista pro derechos humanos.
El Día Mundial de la Libertad de Prensa fue proclamado como tal por la Asamblea General de Naciones Unidas en el año 1993. Desde entonces ha ejercido una importante labor recordando a los gobiernos la necesidad de respetar su compromiso con la libertad de prensa.
Sin embargo, y a pesar de todos los avances, la triste realidad es que aún hoy hay países como Corea del Norte, Birmania, Cuba, Arabia Saudí o China que continúan siendo líderes en la lista de países con mayor presencia de la censura.
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