Mantener una práctica de yoga constante puede ser un reto, especialmente cuando tienes niños. ¿Por qué no combinar los dos?
Eso es lo que muy probablemente debió pensar la norteamericana Charity Grace LeBlanc. Una moderna mamá asidua al deporte que ha decidido no renunciar a los beneficios del yoga y, en vez de eso, complementarlo con su lado más maternal.
© Instagram
Esta joven, fiel defensora de que una madre no debe perder sus inquietudes tras dar a luz, nos demuestra que es no solo posible, sino recomendable, complementar ambas facetas. Si bien, la mayor dificultad inicial es la de mantener la concentración y conseguir la atención de los pequeños, conforme pasan las jornadas consiguen adaptarse sin problema a la rutina incorporándola en su día a día y descubriendo, desde bebés, los beneficios del yoga.
"Cuando eran bebes les hipnotizaba ver cómo hacía los movimientos".
Ellos, que por ahora solo valoran el tiempo de práctica como un periodo destinado al juego, están descubrimiento poco a poco y experimentando en primera persona lo beneficios más saludables de la práctica del deporte.
"Mi hijo está aprendiendo a confiar en mí y mi hija está desarrollando grandes habilidades motoras, en el control de los músculos, para su edad", dice LeBlanc.
"Están aprendiendo a ser fuertes y sanos mientras se divierten.”
Por supuesto, para ella también hay grandes ventajas: "Tengo que trabajar en mi misma pero ahora puedo mantenerme en forma y jugar con mis hijos al mismo tiempo."
Y si te ha gustado, no te pierdas a esta joven estadounidense de 27 años que demuestra que, a pesar de sus kilos, es capaz de hacer cualquier cosa con su cuerpo...
LETTER
© instagram.com/mynameisjessamyn/
