El mundo rural es, probablemente, el que más haya notado los efectos de esta evolución ya que las mujeres de los pequeños pueblos suelen ser las que se han mantenido al margen del mundo laboral y social mientras que, en la actualiudad, han aumentado su participación en todos los ámbitos.
Se empezaron creando Asociaciones de Mujeres Rurales en todos los pueblos y, más tarde, todas ellas se unieron a través de la Federación de la Mujer Rural, desde donde se fomenta la participación social de las mujeres rurales, además, de formarlas, informarlas y asesorarlas para que se conviertan en emprendedoras.
Sin embargo el mundo rural es también, posiblemente, en el que más trabajo queda por hacer. Y es que, de acuerdo con las palabras de Juana Borrego, presidenta de la Federación de Mujeres Rurales (FEMUR) y miembro del Consejo Asesor de Madrid Woman's Week "la mujer rural ha realizado un importante esfuerzo al tener que romper con los roles tradicionales, aún hoy muy arraigados en la sociedad rural".
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Precisamente con el fin de reconocerles el mérito a todas esas mujeres que sacan adelante a sus familias y la economía de sus hogares, en 2008 la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió establecer el 15 de octubre como el Día Internacional de la Mujer Rural. En la resolución la asamblea reconocía "la función y contribución decisivas de la mujer rural, incluida la mujer indígena, en la promoción del desarrollo agrícola y rural, la mejora de la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza rural".
