Por desgracia, en los últimos meses hemos oído hablar mucho sobre violaciones múltiples en fiestas y celebraciones variadas. También de la retransmisión de estos actos inhumanos a través de plataformas sociales como Facebook. A pesar de las noticias que nos llegan, en esta parte del mundo el problema (aunque gravísimo) parece puntual, con casos aislados. Si miramos hacia Brasil, la generalidad asusta: cada día 10 mujeres sufren una violación múltiple.
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Según datos oficiales, en 2016 tuvieron lugar 3.500 casos de violaciones múltiples, lo que representa un 15% del total de violaciones atendidas en los hospitales brasileños. Lo que es aún más alarmante es que se calcula que solamente el 10% de las violaciones que tienen lugar en el país carioca son denunciadas ante las autoridades. Lo cual podría elevar el número de ataque sexuales de los 50.000 registrados oficialmente hasta las 500.000 mujeres agredidas al año.
El tabú alrededor de la violación hace que muchas de las jóvenes abusadas (un 40% son niñas y un 24% adolescentes) hace que no se atrevan a denunciar este tipo de ataques que, muchas veces, termine con consecuencias fatales y alcanzan un nivel de violencia que puede llegar a provocar la muerte de las víctimas.
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