El guapo defensa catalán no podría estar más contento con los cambios que ha propiciado en su vida la llegada de su hijo Milan -quien cumplirá su primer año de vida en febrero- ya que a partir de su nacimiento Gerard Piqué encara los desafíos de su exigente profesión desde un prisma mucho más optimista y relativizando al máximo los problemas. "Milan lo ha cambiado todo y ha hecho de mí una persona totalmente diferente. La temporada pasada el Bayern de Múnich nos eliminó de la Liga de Campeones con un 3-0 y al principio me encontraba anímicamente hundido. Pero al llegar a casa y encontrarme con Milan, cambié por completo de actitud y me di cuenta de que nada es tan grave. No existen los problemas cuando estoy a su lado", reveló en una entrevista al canal CNN.
El carácter tan positivo que irradia el defensa del FC Barcelona desde su estreno como padre tiene mucho que ver con la energía y el buen humor que caracterizan al pequeño durante sus ratos de juegos, un tiempo en el que Piqué siempre trata de estar presente para contagiarse de su alegría y admirar sus rápidos progresos. "Es genial ver cómo aprende algo nuevo cada día y la velocidad con la que está creciendo. Ya anda y corretea por la casa con una energía sorprendente, pero sobre todo me maravilla su inocencia: es nuevo en este mundo y solo ríe, se divierte y trata de ser feliz. Disfruto mucho de su compañía y hace que cada día sea inolvidable", explicó el atractivo deportista.
LETTER