Artículo elaborado por Juan Carlos Montero Vocal de Publicidad, Comunicación y Redes de COPOMA
La necesidad de cuidar nuestros pies constantemente se incrementa dependiendo de la edad y ciertas circunstancias personales. Aunque poco a poco vamos siendo conscientes de la importancia de cuidarlos con cierta periodicidad independientemente de nuestras condiciones personales, a veces, tendemos a prestarles atención únicamente cuando sabemos que corremos mayores riesgos.
Por ejemplo, por la estación del año en la que nos encontremos, o porque sabemos que formamos parte de alguno de los colectivos más vulnerables a padecer ciertos problemas, como las personas diabéticas, los niños, o las personas mayores, que con el paso del tiempo suelen desarrollar inevitablemente diferentes patologías por su pie de alto riesgo.
En este sentido, el nivel de actividad física realizado es uno de los factores que más incrementa esta obligación de mantener ciertos cuidados y precauciones constantes. Pues, los pies de aquellas personas que ejercen una mínima práctica deportiva están más expuestos a sufrir lesiones y anomalías. Por esta misma razón, estas personas deberán tener algunas cuestiones en consideración, como la elección de un buen calzado, pauta que debe estar presente siempre.
Aunque en cualquier caso esto es de vital importancia, cuando se lleva a cabo ejercicio físico lo es aún más, pues algunas partes de nuestro cuerpo se someten a ciertas presiones constantes y bruscos movimientos, por lo que deberemos protegerlas de los impactos tanto como sea posible.
Podología para prevenir
Precisamente en cuestión de salud de nuestros pies y relacionados, como ya sabemos, una de las premisas más importantes, además de saber elegir un buen calzado, es ponernos en manos de los especialistas para que nos aseguren que todo está correctamente y nos asesoren en base a nuestro caso concreto.
Es más, antes de comenzar a practicar cualquier deporte es esencial que un profesional lleve a cabo un diagnóstico personalizado de nuestra situación para asegurar que podemos emprender dichas prácticas deportivas sin peligro.
Los profesionales de la podología serán aquellos que cuenten con la capacidad de conocer y tratar todo aquello referente a nuestros pies y partes del cuerpo relacionadas. Precisamente dichas partes serán las más vulnerables a sufrir cualquier anomalía a la hora de practicar deporte, por lo que la revisión previa será esencial para tratar, examinar y aconsejar a dichas personas. Pero no solo eso, sino que, además de ayudarnos a prevenir lesiones, la Podología deportiva nos ayudará a mejorar nuestro rendimiento y dar el máximo de nosotros en cualquier tipo de ejercicio.
Mejor rendimiento
De este modo, debemos considerar que los profesionales de esta disciplina trabajan a diario para mejorar la salud de los pies de todas las personas y para atender cualquier tipo de necesidad o anomalía. Por ello, con más razón, si sabemos que formamos parte de alguno de los colectivos más vulnerables, debemos extremar aún más las precauciones y acudir con mayor constancia a la consulta de podología.
Donde, en primer lugar, comenzarán por realizarnos un análisis biomecánico de la marcha y la pisada, lo que nos ayudará a poder corregir posibles anomalías. Pero no solo eso, sino que también nos ayudará a aprender a elegir el calzado. Además, en caso de que fuese necesario, podrán diseñarnos unas plantillas personalizadas a nuestro caso que nos ayudará a evitar posibles dolores y daños.
En muchas ocasiones se sufren ciertos dolores en tobillos, rodillas o espalda, que vienen precisamente relacionados con malas prácticas deportivas. Sin embargo, esto no tiene por qué ser debido a que se realicen los ejercicios de forma incorrecta o a que no llevemos un buen calzado, sino a que la manera determinada de realizar dichos ejercicios o los zapatos elegidos, aunque de buena calidad, pueden no ser los más apropiados para nosotros, e incluso nos pueden estar haciéndonos daño. Por ello, ponernos en manos de un especialista es la cuestión principal, tanto para evitar problemas, como para asegurar que estaremos ejercitándonos de la forma más óptima.
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