¿Qué podemos hacer para aligerar ese paréntesis entre viaje y viaje? Tenemos la respuesta y no importa si tu casa es grande o pequeña.
Si eres de las que les encanta viajar, es muy sencillo decorar tu casa con pequeños detalles que hablen de tu personalidad inquieta. Nuestra casa debe hablar de nosotros, de lo que nos gusta, nuestros hobbies y pasiones. Y no es cuestión de llenar tu habitación de souvenirs, himanes de nevera, cojines con el nombre de ciudades y postales por las estanterías. Va mucho más allá.
Si quieres decorar tu casa con estilo, debes darle un par de vueltas para crearla atmósfera que transmita lo que buscas. Una idea muy elegante es darle un uso alternativo a as maletas de piel vintage y utilizarlas como baúles, o, si lo prefieres, puedes apilar unas cuantas de estas valijas y crear una mesita auxiliar muy original.
Estas ideas llegan también a la cocina: puedes coleccionar vajillas del mundo, utensilios hechos con materias primas de otros países, bandejas o cubiertos exóticos. Y a los dormitorios: el corcho con los destinos que has visitado y las fotos de Polaroid siempre funciona.
Para el dormitorio
1. Un mapa del mundo de corcho
¿Qué te parecería que un mapa del mundo coronase el cabecero de tu cama? Si hay una apuesta segura en esto de decorar la casa, es utilizar un mapa del mundo para el salón o la habitación (incluso la de los más pequeños). Si es de corcho, puedes decorarlo con fotos o pines según los países y ciudades que hayas visitado. Un complemento así hará de tu habitación un rincón encantador y, lo más importante, hablará mucho de ti. ¡Y se te ocurrirán nuevos destinos a los que ir!
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2. Un juego de maletas vintage
¿Y este juego de dos maletas vintage en tono barniz? Puedes utilizarlas como baúl, para decorar un rincón de la habitación, para ponerlas a los pies de la cama o, apiladas juntas, como mesita de noche. A la vez que crean un ambiente acogedor y cálido, estos complementos le darán a la habitación un ambiente nostálgico que nos animará a seguir viajando.
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Para la cocina
3. Un especiero
Cardamomo de la India, canela de Sri Lanka, chiles de México, cilantro de África, cúrcuma de Colombia y jenjibre de Perú. ¿Tienes ya donde colocar todas las especias que traes de tus viajes? Un especiero es una opción muy estética que, además de ser útil, le da un toque ideal a tu cocina. En la pared, dentro de un armario o, simplemente, encima de la encimera. Es una forma muy cómoda de organizar las especias y, con la excusa de completarlo, tendrás motivo para ir a todos los lugres a los que todavía no has ido.
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Para el salón
4. Un juego de máscaras
Quizás no hayas estado en África, pero las máscaras tribales de madera son un objeto decorativo con original y con mucha personalidad para darle un toque diferente a la habitación y que pueden darte la motivación que te falta para viajar al continente. Para el salón, el despacho o un pasillo amplio.
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