Las formas de jugar y de disfrutar del ocio no suelen ser las mismas en hombres y mujeres, en papás y mamás. Las diferencias entre unos y otros suelen ser habituales y, aunque por supuesto no es algo en lo que debamos generalizar, si hiciésemos un estudio, probablemente encontraríamos bastantes similitudes a la hora de ver comportamientos y formas de enfrentarse a determinadas actividades dentro de cada uno de los sexos.
