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Lunes: smoothie bowl
Seguro que has oído hablar mucho de ellos en los últimos tiempos. De hecho, esta tendencia de origen estadounidense, ha llegado hasta nosotras y amenaza con quedarse. Desde luego que no seremos nosotras las que digamos que no porque, además de estar riquísimos, unen la fruta, los cereales y el yogur. Y, no nos vamos a engañar, ¡nos conquista por los ojos! ¿Quién no se alegraría el día iniciando su mañana con uno de estos coloridos desayunos?
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Para que te adentres en este maravilloso mundo, a continuación te contamos cuál es una de nuestras recetas favoritas: un smoothie bowl de mango.
Para prepararlo, escogeremos un mango no muy grande, que esté bastante maduro y que haya estado en la nevera hasta el momento antes de preparar el smoothie. Después de pelarlo y trocearlo, lo trituramos y agregamos yogur natural de estilo griego. Después de esto, te recomendamos que añadas media cucharadita de cúrcuma en polvo y mezcles bien.
Una vez que lo hayas vertido en un bol, solo tienes que dejar volar tu imaginación y jugar con los colores, texturas y sabores de las frutas y semillas que quieras añadir. Te recomendamos que te decidas por unas rodajas de plátano, algunas escamas de coco, dos o tres frambuesas y unas cuantas semillas de chía. ¡Una combinación de lo más completa!
Martes: macedonia de frutas
La macedonia de frutas es una de las mejores opciones si eres una amante de las frutas de temporada. Aprovecha el otoño para prepararte un bol con pera, manzana, plátano y zumo de naranja como almíbar casero. Nuestra sugerencia es que cada mañana dediques cinco minutos a prepararte un bol de fruta en el que mezcles al menos tres piezas diferentes. Además, podrás ir variando la receta en función de la estación del año en la que estés.
Para complementar la macedonia, te puedes decidir por un bol de los cereales que más te gusten acompañados de leche desnatada. ¿Qué te parece esta opción?
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Miércoles: yogur de estilo griego con frutas y cereales
Ya estamos casi en la mitad de la semana y ha llegado el momento de darnos un capricho y desayunar como verdaderas reinas. Por ello, nada mejor que comprarte un bonito bol que te saque una sonrisa cuando te levantes de la cama y llenarlo con un yogur griego natural. Una vez que lo tengamos, añade un puñado generoso de muesli, copos de trigo o copos de avena, en función de lo que más te guste.
El punto más dulce lo pondrán las moras, los arándanos o los trozos de manzana; escoge tú misma la fruta que más te apetezca. Y, por supuesto, para poner el broche de oro a este desayuno, nada mejor que una cucharadita de miel. ¡Una auténtica maravilla!
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Jueves: tostadas saladas
Si eres de las que piensa que para ponerle el punto dulce a la vida ya estás tú y prefieres un desayuno salado, el jueves va a ser tu día. Prepara tu café o un té, un zumo de naranja natural y después, deja que sea tu estómago el que mande. ¿Qué te apetece? Nuestras tostadas mañaneras preferidas son las de pechuga de pavo y queso fresco. Pero tampoco podemos decir que no a las de aguacate con aceite de oliva y un toque de pimienta. Si eres más de sabores clásicos, éste será tu día para degustar las de tomate, un chorrito de aceite de oliva y jamón serrano. ¿Con cuál de ellas te quedas tú?
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Viernes: batido saludable
Hay muchas formas de comerse fruta a primera hora del día, como ya has visto en este recetario mañanero que hemos preparado para ti. Si eres un poco 'exquisita' y hay ciertos sabores o texturas que no te gustan demasiado, te proponemos que pruebes a preparar un batido de otoño con algunas frutas de temporada. Lo mejor de esta opción a la hora del desayuno es que puedes acompañarlo de algún bol de cereales o de la tostada que más te guste.
Además, existen dos grandes grupos entre los que puedes decidirte. Por un lado, están los batidos y zumos verdes que nos ayudan a eliminar toxinas y además nos llenan de energía antes de empezar a hacer deporte. Por otro lado, encontramos las recetas llenas de sabor y algo más calóricas para comenzar el fin de semana con fuerza. ¿Qué te parece si mezclamos plátano, manzana, leche desnatada y un par de galletas maría? ¡Pruébalo!
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Sábado: tostadas dulces
Nos encanta el pan de semillas para empezar cada mañana. Si eres de las de la clásica tostada de mantequilla y mermelada, el sábado puede ser el día en el que te des el lujo de comértela para acompañar el café y el zumo de naranja. Si tienes la oportunidad, sería genial que te decidieses por una mermelada casera hecha con fruta de temporada. ¿Te gustaría saber prepararla?
Si lo prefieres, podrías sustituir la mantequilla por queso crema que, combinado con una mermelada de mora, puede que sea uno de los más deliciosos manjares para degustar a primera hora del día. También puedes olvidarte de la mantequilla y la mermelada y darte el gustazo de untarla con crema de cacao... ¡Se nos hace la boca agua!
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Domingo de brunch
Los domingos están hechos para remolonear en la cama, abrir los ojos y decidir que lo mejor es quedarnos un tiempo más durmiendo. Por eso, nosotras siempre aprovechamos estos días para salir y desayunar fuera. Algunos domingos nos decidimos por un desayuno tradicional y 'algo menos saludable' que los del resto de la semana. Pero es que nos hace tan felices degustar un riquísimo chocolate con churros...
Eso sí, si tu plan es salir a desayunar fuera con tu chico o tus amigas y se os ha hecho tarde, ¿se te ocurre una opción mejor que disfrutar de un brunch? Esa tradición anglosajona a medio camino entre el desayuno y la comida es perfecta para días como estos. ¿Quién puede resistirse a los riquísimos huevos benedictinos? Y es que, digan lo que digan, ningún domingo puede ir mal si comienza con un completo brunch en la mejor compañía. ¿Te vienes a nosotras?
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