Desde ayer, ver a una mujer conduciendo en Arabia Saudí ya no será motivo de asombro ni de castigo por parte de las autoridades, claro está. El último país que impedía que las mujeres se pusiesen al volante de un vehículo acaba de derogar esta prohibición y ayer mismo el rey Salmane firmaba un decreto en el que autorizaba la expedición de permisos de conducir. Este avance entrará en vigor en junio de 2018.
Hace ya unos cuantos meses que la activista Fawzia Al-Bakr decidió desafiar las normas establecidas y se lanzó a conducir por las calles de Riad, capital del país y lo grabó con su smartphone para compartir su hazaña reivindicativa en las redes sociales. Tras muchos años de lucha, las mujeres sauditas al fin han conseguido dar este paso al frente.
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A pesar del avance no hay que olvidar que el país ultraconservador considera la figura de la mujer como inferior a la del hombre. Por ello, las mujeres necesita la autorización y tutela de sus maridos, padres o hermanos para desarrollar prácticamente cualquier acción fiduciaria por ejemplo.
Sin embargo, hay esperanza en el país con la llegada al trono del príncipe herededor Mohamed Ben Salman, quien tiene un pensamiento más abierto y, es probable que conceda a las mujeres de su país a derechos que les corresponden y de los que se les está privando ahora mismo.
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