"Mi progenitor biológico maltrató a mi madre durante años, física y psicológicamente, hasta que ella decidió denunciar y separarse tras una brutal paliza”, explica en la plataforma donde ha lanzado su petición, la cual ha sido firmada ya por más de 81.000 personas. Patricia se queja de que el sistema judicial de nuestro país no siempre actúa en consecuencia y afirma que en muchas ocasiones "ha entregado los niños a los maltratadores". Cree firmemente que una de las soluciones pasa por que los jueces escuchen a los niños y actúen. "Si un niño dice que no quiere ir con el maltratador, debe respetarse esa opinión. A mí en diez años el juez no me quiso escuchar", afirma.
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Durante el último debate político, antes de las elecciones, los cuatro candidatos de los principales partidos no dedicaron ni 30 segundos a la violencia de género, a pesar de ser una de las principales lacras en nuestro país: el último año se cerró con la muerte de 57 mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas, y además, 123.275 mujeres presentaron una denuncia por maltrato en la comisaría.
"Pido a los candidatos a la presidencia del Gobierno que expliquen qué van a hacer para ayudar a las víctimas, qué van a hacer para que estos niños, víctimas de la violencia de género, se sientan seguros y amparados por un sistema que, a día de hoy, no les da la oportunidad de expresarse ni defenderse como personas", exige Patricia, quien ha vivido en primera persona esta situación.
La madre de Patricia decidió separarse cuando ella tenía seis años, pero la situación no fue sencilla. "El proceso judicial se complicó, llegaron a quitar a mi madre la custodia durante tres meses”, ha contado a Change. Afirma que quien más le ayudó en todo ese tiempo fue su hermano menor. "Me cuidó él más a mí que yo a él, no sé de dónde sacaba las fuerzas. Sufría cuando llegaban los fines de semana en los que tenía que irme con mi progenitor”.
En cuanto a las medidas que se deberían tomar para tener en cuenta la voz de los niños, Patricia lo tiene claro: "Creo que las mejores medidas que los políticos pueden tomar contra la violencia doméstica pasan, primero, por informarse, tomar conciencia y empatizar con las víctimas. Y segundo, por actuar, de verdad". El objetivo es llegar a las 150.000 firmas y poder entregar esta petición a Mariano Rajoy, Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Albert Rivera.
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