Las fiestas taurinas que se celebran desde la semana pasada en Pamplona se han visto empañadas por las agresiones sexuales a diferentes mujeres. En estos seis días de sanfermines se han producido cuatro violaciones, un intento de violación y siete abusos, según informa la Junta Local de Protección Civil. La primera víctima, de 19 años, sufrió una agresión colectiva por parte de cinco hombres, un guardia civil entre ellos, que además grabaron los abusos con un teléfono móvil. Un acto tan repulsivo e intolerable contra el que se han celebrado manifestaciones de protesta convocadas por colectivos feministas y peñas.
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Después de conocer lo que está ocurriendo en Pamplona, no está de más valorar la situación en todo el país. Los datos oficiales indican que en 2009 se registraron 1.304 violaciones, en 2010 fueron 1.177 y en en 2011 un total de 1.513, la cifra más alta de todas las estadísticas, según ha recogido Europa Press. Interior apuntaba que cada día se registran tres agresiones sexuales con penetración, una cada ocho horas
El año pasado se registraron al menos 1.127 denuncias en nuestro país. Las cifras nos llevan a preguntarnos qué está ocurriendo en esta sociedad. Algunos expertos apuntan a la educación como la base para concienciar. "La única forma de erradicar este tipo de agresiones es insistir en escuelas, colegios, en la población preadolescente. Es seguir luchando por la igualdad, porque desde el momento en que te convierten en una cosa pueden hacer contigo lo que quieran. Y se nos sigue cosificando", ha declarado la presidenta de la Federación de Asociaciones de Asistencia a Mujeres Violadas, Tina Alarcón, a El Confidencial. "Cuando una mujer dice no, es un no, ni un tal vez ni un quizá. Un no".
Y mientras tanto, en España las agresiones sexuales no se contemplan en la Ley Integral como violencia de género. "Nos obliga el convenio de Estambul, firmado por España, según el cual debe considerarse también cualquier forma de violencia sobre la mujer, no sólo la provocada en la pareja, como la trata con fines de explotación sexual, la mutilación genital femenina, la discriminación por razón de sexo, el acoso por razón de sexo y por supuesto, la violencia sexual sobre las mujeres y niñas", ha recordado María Ángeles Carmona, presidenta del Observatorio de Violencia Doméstica y de Género del CGPJ.
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