Aunque esta noticia pueda sonarte a broma, te prometemos que el día de los inocentes no se ha adelantado. La cadena de comida rápida KFC ha decidido probar suerte en el mundo de la cosmética y acaba de lanzar los primeros esmaltes de uñas comestibles, con sabor a pollo y con dos variedades: una picante para los amantes de la comida más hot, y otra normal para los paladares menos intrépidos.
Este lanzamiento forma parte de su incursión en el mercado asiático, y bajo el lema "Para chuparse los dedos" (literalmente) pretenden acercarse al público más joven ofreciéndoles un producto novedoso y diferente en el que aseguran haber utilizado los mismos ingredientes que para sus famosas recetas de pollo frito.
© KFC
“Para usarlo, los consumidores solo tienen que aplicarlo y dejar secar como un esmalte de uñas normal, y después lamer una vez y otra y otra…”, recomiendan desde el propio departamento de marketing de KFC, desde el que además confían en que el lanzamiento sea todo un éxito en Hong Kong. De momento solo está a la venta allí y en edición limitada, aunque no sabemos si tienen pensado trasladar este lanzamiento a occidente.
Nosotras no estamos muy convencidas de si conseguirán triunfarán los esmaltes de uñas comestibles, por lo que de momento nos quedamos con los tradicionales, aplicados, eso sí en las tendencias más novedosas.
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