Organizar la pedida de mano es sencillo. Aunque es un acto formal, ¡no hay que perder los nervios! Normalmente se celebra tres meses antes del día de la boda, y la tradición es que lo organice la novia en casa de sus padres.
Para la pedida de mano se suele preparar una cena con los familiares más cercanos, pero si no quieres estar liada, ni liar a tu madre en la cocina, puedes encargar un cocktail, un catering o comprarlo todo hecho.
Lo mejor es una celebración íntima y sencilla, con tus padres, hermanos... Ten en cuenta que tu padre dirá algunas palabras delante de los invitados; pocas, así que ¡no te asustes!
Tras la pedida, en la que, por supuesto, diremos que sí, se hace entrega de los regalos. Lo más normal es que los padres del novio regalen a la novia una joya y los padres de la novia le regalen a él un reloj. Si tu novio suele vestir clásico, bien por su trabajo o porque le gusta, ¡unos gemelos son una opción estupenda!
Por otro lado, si alguno de los dos sois muy aficionados a algún tipo de deporte o tenéis algún hobby, una buena idea puede ser regalar algo relacionado con ello.
Respecto a qué ponerte, te aconsejamos algo elegante pero sin pasarse, ¡que todavía no ha llegado la boda! Lo mejor es un vestido corto de cocktail, con un poquito de tacón y, por supuesto, deja sitio para lo que te vayan a regalar. Si es un anillo ¡recuerda no ponerte ninguno!
Intenta descansar durante el día, para que los nervios no te jueguen una mala pasada. También puedes ir a la peluquería para que te peinen, eso sí, de manera discreta y maquíllate de forma muy natural. ¡Estarás radiante y la pedida de mano será perfecta!
Si tienes dudas sobre qué regalar a tu pareja, visita nuestro álbum y descubre los pendientes y relojes que te proponemos para tu pedida ¡Te van a encantar!
Contenido elaborado por bodabook para enfemenino.
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