En algún momento que normalmente se remonta a tus primeros recuerdos, dejaste ser la preferida de la casa. Sentiste sobre tus hombros la responsabilidad de ser un ejemplo para tu hermano o hermana pequeños. Te viste en la obligación de cuidarle y enseñarle siempre el buen camino. Discutisteis y quisiste imponer tu criterio a base de broncas y peleas. Sí, así es la vida del hermano mayor...
Seguro que todos los primogénitos saben perfectamente de lo que hablamos pero, ¿sabe el resto del mundo cómo es la vida de un hermano mayor? Estos 10 momentos la describen a la perfección, ¿no crees?
© Sonrisas y lágrimas
1. Siempre serás la mayor para bien y para mal
Con 15 años eras demasiado pequeña para salir a cenar con tus amigas pero lo suficientemente mayor como para quedarte en casa cuidando a tus hermanos... Whaaat?
2. Tendrás que abrir camino a tus hermanos
Así es. Después de ti todo será mucho más sencillo. Tus hermanos ya no oirán hablar de horas de llegada, ni de otro tipo de luchas que tú abanderaste y peleaste como si te fuese la vida en ello..
3. Dejarás de jugar a las muñecas para sentirte un poco "madre" real
No sabes muy bien por qué, pero tienes un instinto maternal hiperdesarrollado con tus hermanos pequeños. Y a medida que pasan los años, se acentúa... ¿Ese tic tac que se escucha será tu reloj biológico?
4. Las comparaciones serán inevitables
Para bien o para mal serás tú el espejo en el que ellos se mirarán y, a veces las consecuencias de esto pueden ser terribles...
5. Solo tú has experimentado en tus carnes lo que es ser hija única
Solo tú puedes recordar con añoranza aquellos días en los que eras la reina de la casa.... Sniff sniff.
6. Sentiste celos aunque te empeñes en decir lo contrario
Desarrollaste técnicas infalibles para acaparar la atención de tus padres y lo sabes.
7. Eres la it girl de la familia
Eres un referente de estilo para tu hermana. De hecho, te encanta que te observe con admiración infinita mientras te arreglas para salir. Reconócelo...
8. La llegada de tu hermano fue un punto de inflexión en tu vida
La llegada de un hermano te hace madurar de golpe y porrazo pero bueno, todo tiene sus cosas buenas, ¿no?
9. Sabes, como nadie, lo importante que es llegar la primera
Ser la primera te hace ser una persona tremendamente ambiciosa. Tú mejor que nadie sabes lo importante que es llegar la primera a todos los sitios.
10. Ni la mismísima Beyoncé. Tú sí que eres un ídolo para tus hermanos
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