Más que práctico, este electrodoméstico se posiciona como un indispensable en la actualidad. Lo usamos a menudo sin pensar, a veces varias veces por semana, convencidos de que no gasta tanto como otros electrodomésticos en la factura. Sin embargo, una comparación impactante recuerda su verdadera voracidad: consume tanto como 65 neveras encendidas al mismo tiempo, según JVTECH.
Una realidad sorprendente, ya que solemos asociar este tipo de consumo excesivo con otros equipos como la secadora o el calentador de agua. La paradoja es evidente: este compañero de cocina está presente en casi todos los hogares, pero pocos se dan cuenta de su verdadero impacto en el consumo doméstico. Ya sabemos que una nevera funciona de manera continua y puede representar un peso considerable en la factura eléctrica.
Sin embargo, frente a este otro aparato, incluso la nevera parece modesta. El desconocimiento de su funcionamiento y de sus necesidades energéticas explica por qué muchos siguen utilizándolo sin medir sus consecuencias económicas y ecológicas. ¡Sigue leyendo para descubrir más!
El electrodoméstico que podría gastar más
Hablamos del horno eléctrico, una herramienta culinaria que todos usamos a diario. Su potencia media varía entre 2.000 y 5.000 vatios, lo que puede representar entre 40 y 90 kWh al mes en función de la frecuencia de uso. En comparación, un frigorífico funciona con una potencia nominal de entre 300 y 800 vatios.
Según un estudio realizado en 100 hogares en Francia, un horno eléctrico puede alcanzar hasta 224 kWh al año. Los demás electrodomésticos, salvo algunos grandes equipos, permanecen muy por debajo. Naturalmente, el tamaño, el modelo y la duración de uso influyen mucho en el gasto final: cuanto mayor es la potencia y más largo el tiempo de cocción, más sube la factura.
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Otros datos que deberías conocer sobre el uso del horno
Otro aspecto que deberías conocer sobre el uso del horno es que algunos modelos siguen consumiendo electricidad incluso estando apagados. Este consumo fantasma suele alimentar un reloj o un panel de control digital. Medidas realizadas en California detectaron un promedio de 67 vatios en modo standby, lo que representa entre un 5 % y un 26 % del consumo anual del aparato.
Por suerte, existen soluciones para disfrutar del horno sin arruinarse. Basta con adoptar algunos buenos hábitos como:
1. Agrupar varias cocciones después de un solo precalentamiento.
2. Apagar el aparato unos minutos antes del final para aprovechar el calor residual.
3. Evitar abrir la puerta con demasiada frecuencia para no perder temperatura.
4. Desenchufarlo después de usarlo si el modelo permanece en standby.