Sí, no estás leyendo mal: el Beer Yoga existe. La idea de combinar esta disciplina con la cerveza surgió en Alemania, después de una clase improvisada en el festival Burning Man. Lo que podía haberse quedado en una anécdota, fue toda una inspiración para dos instructoras, Jhula y Emily, que decidieron crear una clase real de yoga en la que se utilizaran las botellas de cerveza. ¿El objetivo? Aunar el placer y la alegría que supone tomar una cerveza con el yoga para potenciar los beneficios de este ejercicio y alcanzar un nivel más elevado de conciencia.
© bieryoga.de
Como puedes ver en las fotos, durante las clases se utiliza la botella de cerveza para realizar diferentes asanas o posturas de yoga. Esta sirve, en muchas de ellas, para trabajar el equilibrio. Además, de vez en cuando y según el ejercicio, los alumnos pueden refrescarse dando un buen trago.
Esta tendencia ya ha llegado a países como Tailandia, donde se ha celebrado un evento al que asistieron muchos apasionados del yoga y de esta bebida. En España, por el momento, no hay ningún lugar en el que practicar esta curiosa combinación. ¿Qué te parece?
Desde aquí te recomendamos practicar yoga por todos los beneficios que puede aportarte, tanto a nivel físico como mental. Con esta actividad aprenderás a relajarte, a controlar el estrés y a la vez conseguirás tonificar tus músculos y mejorar la flexibilidad. En cuanto a la cerveza, aunque se trata de una bebida que tiene propiedades positivas, recuerda que no deja de ser una bebida alcohólica y debe consumirse con moderación. La recomendación de la OMS es no superar los 30 gramos de alcohol diarios en el caso de los hombres y los 20 gramos en el caso de las mujeres.
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