Aunque añadir cerveza dentro de la receta del pan puede resultar sorprendente son productos que tienen muchas cosas en común. Ambos están basados en cereales y su elaboración depende de procesos de fermentación. Por ello, era muy difícil que pan y cerveza no terminaran uniéndose en algún momento.
El color y el sabor final del pan van a estar determinados por el tipo de cerveza que elijamos para su preparación. Si elegimos una cerveza negra obtendremos un pan más oscuro, con un sabor más fuerte que el habitual de un pan tradicional. La elección de la cerveza irá, por tanto, en función de los gustos de cada uno.
El pan dulce con cerveza cuenta con un sabor muy característico que lo hace ideal para acompañarlo con una tabla de queso o embutidos. También es buena opción para acompañar guisos ya que el pan de cerveza se caracteriza por una corteza crujiente y una miga densa y esponjosa, excelente para para mojar salsas. De hecho, esta receta frecuentemente para los panes de hamburguesa ya que quedan muy tiernos por dentro y tostados por fuera. Esta consistencia le permite aguantar cualquier salsa que le añadamos a la hamburguesa.
Por cierto, cabe aclarar que el alcohol de la cerveza desaparece durante el proceso de preparación por lo que tendremos un pan auténticamente 0’0%. También destacamos que esta receta puede adaptarse para los intolerantes al gluten con cerveza y preparado para pan sin gluten.
En esta receta os proponemos la posibilidad de darle un toque dulce a la cobertura del pan con una mezcla de azúcar y canela. También se puede optar por acompañar la receta con nueces o semillas, queso rallado o especias como el romero o el perejil. Los hay más atrevidos que incluso incorporan el chocolate a esta receta de pan de cerveza. Como suele ocurrir con este tipo de recetas, las opciones son muchas por lo que el resultado final irá a gusto del consumidor.
Ingredientes para elaborar el pan de cerveza:
- 500 g de harina de trigo
- 100 g de azúcar
- 3 huevos
- 14 g de levadura fresca Levital
- 50 ml de cerveza
- 50 g de mantequilla
- 1 huevo batido
- Para la cobertura (esta parte de la receta es opcional) necesitaremos:
- 1 cucharada de azúcar
- 1 pizca de canela
Preparación del pan de cerveza:
Para empezar, vamos a deshacer la levadura fresca en un vaso con tres dedos de agua aproximadamente. A este mismo vaso vamos a añadir una cucharada de azúcar y una cucharada de harina. Mezclamos los ingredientes, tapamos el vaso con un paño de cocina y dejamos reposar para que la levadura se active.
Mientras tanto, añadimos en un bol la harina, el azúcar, los tres huevos y la mantequilla. Vamos a mezclar todos los ingredientes durante 5 minutos con la ayuda de nuestros dedos y, a continuación, vertemos el contenido del vaso en el bol.
A partir de este momento, añadimos de manera progresiva un chorrito de cerveza y amasamos durante medio minuto. No utilizaremos más de 50 ml de cerveza, es decir, un cuarto del tamaño estándar de una lata. El objetivo es conseguir que nos quede una masa compacta y lisa.
Si vemos que no obtenemos esta textura, podemos incorporar un poquito más de cerveza. Hay que tener cuidado y no añadir en exceso para que la masa no quede aguada. Como hemos comentado anteriormente, la cerveza que elijamos va a determinar el sabor (y el color) final del pan, por lo que es importante elegir una cerveza cuyo sabor nos guste.
Limpiamos el bol y lo pintamos de aceite para colocar de nuevo la masa. Cubrimos el recipiente con un paño de cocina y dejamos que repose aproximadamente una hora hasta que la masa aumente de tamaño.
Transcurrido este tiempo, partimos la masa por la mitad.
Enharinamos la superficie de trabajo y amasamos ambas porciones dándoles forma de bola. A continuación, dejamos reposar de nuevo la masa durante media hora aproximadamente para que vuelva a aumentar su tamaño.
Cuando la masa haya aumentado nuevamente de tamaño, pintamos cada bola con huevo batido. Para darle el toque dulce, podemos añadir una mezcla de azúcar y canela espolvoreada por encima. Esta mezcla debe prepararse previamente en una taza en la que añadiremos una cucharada de azúcar y una pizca de canela.
Precalentamos el horno a 180ºC durante 20 minutos y colocamos las dos porciones en la bandeja del horno, cubierta con papel vegetal. Hacemos dos cortes en forma de cruz en cada uno de los panes y ya los tenemos listos para meter en el horno. El tiempo de horneado debe ser aproximadamente de 20 minutos aunque variará en función del horno.
Cuando veamos que los panes han comenzado a dorarse, los sacamos del horno, dejamos enfriar sobre una rejilla y ¡listo para comer!
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Contenido elaborado en colaboración con Levital
