La comunidad afroamericana de Hollywood ha dado un golpe sobre la mesa y es que muchos actores de color se han indignado ante las últimas nominaciones de la Academia de los próximos Oscar 2016 que han sido absolutamente "blancas". Y con blancas no nos referimos a unas votaciones limpias, como suelen ser este tipo de premios, de esto no hay duda, a lo que queremos hacer referencia es al hashtag que ha inundado las redes sociales desde el día del anuncio de los nominados: #OscarsSoWhite.
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Actrices como Lupita Nyong’o publicaban en su cuenta de Instagram comentarios como este: "Los premios no deberían dictar los términos del arte en nuestra sociedad moderna, pero deberían ser el reflejo de lo mejor que nuestro arte puede ofrecer", expresaba la actriz. Pero ella no fue la única en unirse a esta reivindicación ya que actores de la talla de Spike Lee, Will Smith y Jada Pinkett-Smith anunciaban su decisión de no asistir a la ceremonia del 28 de febrero al ver por segundo año consecutivo que no había ningún actor afroamericano nominado.
Concretamente Lee debería recoger su Oscar de honor, que reniega de la siguiente manera: "Estoy muy agradecido pero ni mi mujer, Tonya Lewis Lee y yo no acudiremos a la ceremonia de febrero (...) ¿Cómo es posible por segundo año consecutivo que los 20 contendientes en las categorías de actuación sean blancos?", publicaba en su cuenta de Instagram.
Ante toda la polémica que ha suscitado este acontecimiento, Cheryl Boone Isaacs (de raza negra), en representación de la Academia, emitía un comunicado en el que anunciaba "grandes cambios" y en el que se revelaba la intención de rejuvenecerse para conseguir ser una mejor representación de Estados Unidos, ya que el 13% de los ciudadanos son afroamericanos.
La Junta Directiva de la Academia explicaba en este comunicado una serie de cambios al respecto y anunciaba que era el fin los derechos de voto vitalicios. Además, añadía que los miembros podrán votar el resto de su vida solo si:
- Han ganado o han sido nominados al premio
- Si han tenido el derecho al voto durante tres décadas diferentes.
Estas nuevas condiciones se harán efectivas el próximo año pero también tendrán efectos retroactivos. Asimismo, otra medida que hace referencia en buena parte a la polémica de #OscarsSoWhite será la inclusión de nuevos miembros para apostar por una mayor diversidad en la organización.
Si echamos la vista atrás, en 2015 tampoco hubo ninguna nominación a afroamericanos y muchos de los tuits que se desecadenaban tras el de Lupita N'dongo compartían infografías que hacían mucho más visuales las nominaciones de los últimos años:
Pero han sido muchos otros los actores, de raza blanca, los que también han querido participar en este debate expresando su opinión sobre el trabajo que la Academia lleva a cabo durante años. George Clooney afirmaba que es "absolutamente cierto" que la industria no representa adecuadamente a los artistas negros y ponía como ejemplo los casos de Will Smith o Idris Alba, en La verdad duele y Beasts of No Nation, y que no han optado al Oscar por sus respectivos papeles.
Reese Whiterspoon, como miembro de la Academia pedía una mayor representación entre los miembros que pueden votar y por su parte, Danny de Vito se sumaba a las críticas ayer domingo, diciendo "somos una panda de racistas". Mientras, Viola Davis ha asegurado: "El problema no está en los Oscar, está en el sistema de producción de películas de Hollywood". Y es que los datos que se entresacan del último informe de 2015 sobre diversidad en Hollywood realizado por Ralph J. Bunch Center for African American Studies, de la Universidad de California, afirman que el 94% de los consejeros delegados de la industria del cine son blancos y el 100% son hombres.
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Intuimos que la inciativa #OscarsSoWhite seguirá dando mucho de que hablar por lo menos hasta la celebración de la próxima gala que tendrá lugar el próximo 28 de febrero en el Teatro Dolby, en Hollywood. ¿Habrá algún actor que haga referencia a este asunto? ¿Seguirá estando tan vivo el hashtag en redes sociales? Pronto saldremos de dudas.
