Las mujeres han resultado ser un suculento objetivo para los inversores que hoy en día ven como caen las cifras de dos dígitos en economías que hasta hace poco parecían invencibles, como la china. La banca privada de Bank of America lo tiene claro e insiste en que el consumo femenino ofrece un crecimiento incalculable, ya que el 50% de las mujeres forma parte de la economía de forma oficial, y aún con estos datos, los ingresos globales en mujeres sumaron los 15 billones de dólares en 2014, lo que supone hasta un 40% más que la economía asiática.
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En el último informe realizado por Joseph Quinlan, director general y de estrategia de US Trust, asegura que “siendo más ricas y más sanas, influyentes y creativas, las mujeres representan en estos momentos uno de los grupos económicos más poderosos, no solo en Estados Unidos, sino en el mundo entero”. Todo ello, prosigue, está directamente vinculado con la educación y por tanto, una mayor participación en el mercado de éstas y es que "el poder adquisitivo de las mujeres nunca ha sido tan grande".
Además, Quinlan afirma en su informe que: "Alrededor del globo, hay más niñas en el colegio, más mujeres trabajando y las políticas empiezan a buscar que se trate a las mujeres más equitativamente". Por ello, se vuelve imprescindible la lucha por la igualdad en el trabajo por parte de hombres y mujeres, ya que esto supondría sumar un incremento hasta de 28 billones de dólares al PIB mundial en los próximos 10 años.
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