1. Las chicas son guerreras
Mientras Violeta o Dakota han trabajado menos en la isla que un político en verano, la ex concursante de Maestros de la Costura no se ha dejado nada por hacer. Con la fuerza de un ejército, Mahi ha superado con éxito todas las pruebas a las que se ha enfrentado durante tres largos meses de concurso y aun con su cuerpo pequeñín y sus incómodas pelucas, de su boca nunca ha salido un ‘’quiero abandonar’’. Por su valentía y porque es la única mujer que ha llegado a la final, la granadina tiene cada vez más papeletas para continuar el legado de la gran Sofía Suescun, ganadora de la última edición.
2. Respeto y elegancia, sus dos pilares
Mahi no se ha cortado ni un pelo de su peluca a la hora de decir las verdades a la cara, discutiendo con sus compañeros siempre que algo le ha parecido mal y enfrentándose a todos aquellos que se posicionaban en su contra. En una de sus broncas más sonadas con Violeta, la experta en moda demostró que con respeto y humildad podía ganar a cualquiera en una discusión, ¡incluso a la ex tronista!
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‘’Estás diciendo que somos un grupo de asquerosos y de gentuza. Yo voy a decir algo, ¿no? Porque yo estoy en este grupo’’, le soltó a Violeta mientras ésta despotricaba lo más grande de todo el grupo y es que, otra cosa no, pero la de Mujeres y Hombres y Viceversa tiene una facilidad para el insulto que ya la quisiéramos nosotros para aprendernos todos los ríos de España. Pero, sin achantarse y con más gracia que Terelu en Paquita Salas, Mahi nunca dudó en plantarle cara a la valenciana, consiguiendo así tener a gran parte de la audiencia de su lado, audiencia que por cierto, le ha llevado en volandas hasta la gran final. ‘’Yo hago videos de mí cagando que es mucho más digno que videos discutiendo contigo’’ o ‘’ a ver si se queda muda y le revienta la garganta’’, fueron algunas de las perlitas que Mahi le soltó a Violeta en aquel caluroso día de playa, ¡si es que no se puede decir más con menos!
3. Mujer empoderada y reconvertida
Mahi ha sido capaz de abrir su mente y ver más allá de sus pestañas postizas. Después de vivir bajo las duras y extremas condiciones a las que someten a los concursantes en el reality, la muchacha, más madura que los cocos que se ha comido, ya ha reconocido en numerosas ocasiones que antes de comenzar la aventura se consideraba una persona superficial que daba demasiada importancia al físico y al estar siempre divina de la muerte. A punto de llegar al final del concurso, esa visión de sí misma ha cambiado por completo, dejándonos conocer a una Mahi renovada, natural y más sencilla que unas zapatillas de esparto. ¡Bravo por ella!
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4. La reina del Palafito
Expulsada y con un pie en la calle, Mahi sacó fuerzas de lo más profundo de su ser y comenzó un nuevo capítulo en su historia de la mano de Chelo García-Cortés. Este cómico dúo de divas playeras nos conquistó desde el primer minuto gracias a su optimismo desmedido y sus ganas locas por seguir en el concurso. Nunca se escuchó un amago de abandono, nunca se mostraron débiles ante las desdichas que el destino les tenía preparadas, como las fuertes tormentas, la falta de leña o la escasez de pesca. Iban a por todas y, aunque Chelo se quedó en el camino, que su fiel compañera de Palafito ganara sería un gran premio también para la periodista y es que además de rivales en Honduras, se han convertido en grandes amigas.
5. Sus rivales, ¿dignos ganadores?
El falsuno de Albert, el culebro de Omar y el veleta de Fabio, contra estos tres amiguis tiene que disputarse Mahi el maletín y, viendo cómo se están desarrollando los últimos acontecimientos, todo apunta a que la gente ha empezado a cansarse un pelín de las gracias del Illuminati y de los cambios de chaqueta de Fabio, que lo mismo critica a Albert por detrás que le alaba cosa mala tratándole de hermano, primo y friendfo del alma. Para el público, la lucha final estará muy, pero que muy reñida entre Mahi y Albert, dignos finalistas por el concursazo que han hecho y por lo mucho que nos han dado.
6. Su novio, una joya por descubrir
Si conocer a Mahi fuera de los talleres de costura del programa de Televisión Española ha sido todo un descubrimiento, conocer a su novio Rubén ya nos ha enamorado del todo. Juntos mantienen una idílica relación basada en el cariño y la confianza que ha dejado al público con la boca abierta. Romántico, natural, buenazo y uno de los mejores defensores que han pisado el plató de Telecinco; esta pareja nos ha conquistado y muchos ya les animan a que se monten su propio reality, ¡seguidores no les iban a faltar!
7. Sentido del humor, su arma más letal
Bailando, partiendo cocos, intentando pescar o de charla con sus compis, si hay alguien que nos ha regalado las mayores carcajadas de esta edición ha sido Mahi, gracias a su personalidad arrolladora y su increíble sentido del humor, que ha sacado a relucir a pesar del hambre, el cansancio y la falta de higiene. ¿Más fuerza mental que esta mujer? ¡No existe!
8. Desmontando el mito de los tronistas
Año tras año, edición tras edición, los aspirantes y tronistas de Mujeres y Hombres y Viceversa han arrasado en el casting de Supervivientes, durando en la mayoría de ocasiones lo que dura un caramelo en el patio de un colegio. Por ser un perfil completamente diferente, por no cumplir con el canon de belleza que está de moda y por no hacer caso a los continuos cachondeos de muchos de sus compañeros contra ella, especialmente por parte de Violeta, Mahi merece más que nadie que Jorge Javier pronuncie su nombre el próximo jueves.
9. Protagonista sin buscarlo
Vale, no es la gran Isabel Pantoja, tampoco es la polémica y enamoradiza Violeta y ni por asomo es una de las illuminati del clan de Omar Montes y precisamente porque sin ser nada de eso ha sabido ganarse un hueco muy especial en el corazón de compañeros, equipo y audiencia, merece ganar Supervivientes.
10. De las pocas que se va con amigos
Al final, en un concurso como éste, lo más importante es la convivencia, el saber adaptarse a las diferentes personalidades de tus compañeros y conseguir poco a poco que esos desconocidos se conviertan en tu familia. Mahi ha hecho posible lo imposible, acabando su concurso sin enemistades con nadie y con el buen sabor de boca de saber que, al llegar a España, será recibida con los brazos abiertos. ¡Ay, Supervivientes, cuántas horas de sueño nos quitas pero que cosas tan bonitas nos das!
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