La escritora y dramaturga Ana Diosdado ha muerto este lunes en Madrid de forma repentina a los 77 años de una parada cardiorrespiratoria cuando asistía a una reunión de la Junta Directiva de la Sociedad General de Autores de España. El mundo de la cultura dará este martes su adiós a Diosdado, una mujer "bondadosa" en su faceta personal pero "revolucionaria" en su faceta profesional, ámbito donde sus compañeros y amigos la han definido como una "gran dramaturga".
Será la sede de la SGAE, donde ha fallecido este lunes durante el transcurso de la Junta Directiva, la que acoja este martes a partir de las 16:00 horas, y por expreso de su familia, la capilla ardiente de la dramaturga, directora y actriz Ana Diosdado, nacida en 1938 en Buenos Aires, donde estaban de gira sus padres, los también actores Isabel Gisbert y Enrique Diosdado.
Diosdado, ha descrito Acosta, estaba "perfectamente" cuando ha llegado este lunes a la sede de la SGAE, en la madrileña calle de Fernando VI, ha pasado a verle a su despacho y ha estado "bromeando con su peculiar sentido del humor" sobre su estado de salud. Luego han entrado a la reunión y cuando ya llevaban "un tiempo" se ha mareado y "se le ha puesto muy mal color de cara". Entonces han llamado a una asistencia del Samur y han sido los sanitarios los que, tras intentar reanimarla durante 50 minutos, les han comunicado que había fallecido.
