Es por esto que muchas ciudades se han puesto manos a la obra para liderar la transición hacia el desarrollo de ciudades sostenibles y comprometidas con el medio ambiente. Una ciudad sostenible es aquella que ofrece un equilibro entre desarrollo económico y bienestar: brinda calidad de vida a su población a la vez que es respetuosa con el medio ambiente. Existen 3 variables que se tienen en cuenta para medir la sostenibilidad de una ciudad:
- Social: evalúa la calidad de vida de la población (sanidad, vivienda, trabajo, educación, etc.).
- Económica: como su nombre lo indica, esta variable mide el desarrollo empresarial y económico de la ciudad.
- Ecológica: evalúa todo lo relativo a los factores ambientales, iniciativas de reciclaje, emisiones de CO2, áreas verdes, etc.
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Ciudades como Londres, Estocolmo, Amsterdam, Nueva York, Singapur, Zürich, Sidney, Edimburgo y Viena son consideradas como ciudades sostenibles. En 2016 se lanzó el primer ranking a nivel mundial de sostenibilidad, el llamado Global Destination Sustainability Index (Índice Global de Sostenibilidad de Destino). El Índice Global de Sostenibilidad de Destino (GDSI) ha nombrado a Gotemburgo, Suecia, como el campeón de la sostenibilidad desde 2016.
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Gotemburgo, la ciudad que ha ganado 4 años consecutivos el premio a la sostenibilidad
Gotemburgo tiene 9.678 metros cuadrados de espacio verde por ciudadano. Su aeropuerto (Landvetter) ha tenido el nivel más alto de la Acreditación de Carbono en Aeropuertos (ACA) desde 2011, lo que significa que es neutro en la emisión de carbono.
El 65% de su transporte público funciona con energía renovable y el 92% del alojamiento en Gotemburgo cuenta con certificación ecológica de organizaciones regionales de sostenibilidad.
La ciudad tiene a Liseberg, un parque temático con atracciones que funcionan completamente con energía eólica renovable.
¿Crees que en unos años todas las ciudades serán así?
