Inicio / Maternidad / Bebés y niños / Cuidados y consejos - Bebés y niños

Los cuidados del bebé de los 6 a los 9 meses

por Blanca Nieto ,
Los cuidados del bebé de los 6 a los 9 meses

La introducción de alimentos sólidos a su dieta, aprender a quedarse dormido solito, la aparición de los primeros dientes... ¡Un trimestre lleno de cambios!

Índice
  1. · Sus primeros dientes
  2. · El paso a la alimentación sólida
  3. · El desarrollo del bebé
  4. · Como crear hábitos de sueño saludables

El periodo de los 6 a los 9 meses del bebé es uno de los más importantes para su desarrollo, ya que está lleno de cambios para el pequeño. Será cuando sus primeros dientes aparezcan, comience a cambiar su alimentación incorporando nuevos alimentos a su dieta, comenzará a prestar más atención a todo lo que le rodea y por tanto distraerse más y es hora de establecer hábitos de sueño saludables para que también aprenda a descansar.

Video por Carla Dominguez

Sus primeros dientes

Normalmente la salida de los dientes varía en función del bebé. Pueden comenzar a salir entre los 4 y lo 7 meses, aunque también puede darse casos de dentición tardía (la precoz se considera a los 3 meses) en los que no aparezcan hasta pasado el año. Esto siempre depende de cada niño y sobre todo, de su alimentación. En primer lugar suelen salir los dientes de delante de la mandíbula inferior, después los dos de la parte superior, los de los lados y por último los de detrás.

Durante esta época debemos ser muy pacientes con ellos. El dolor que supone la salida de los primeros dientes de leche es muy molesto y es el momento de introducir los mordedores para aliviarles. Los alimentos fríos también pueden ayudarle a mejorar: como las papillas de frutas o yogures. Notarás que babean más, encías inflamadas, su carácter puede ser más irritable que de costumbre... Aunque muchas mamás asocian una posible relación entre la dentición y la subida de fiebre o diarreas, la verdad es que los expertos aseguran que pueden tratarse de simples coincidencias. En todo caso, si ves a tu niño más incómodo de lo normal, que comienza a comer peor, dormir mal... te recomendamos que visites a su pediatra para que lo valore.

Existen también juguetes creados especialmente para calmar el dolor del bebé durante esta etapa. Por ejemplo, este mordedor con forja de simpática jirafa está relleno de maíz y caucho 100% naturales y seguros para el bebé, para calmar el dolor de las encías cuando le están saliendo los dientes. Puedes comprarlo en Amazon por 11€, es el mejor valorado de Amazon. Otra opción es este mordedor que además le ayudará a desarrollar sus habilidades motoras y sensoriales gracias a las diferentes formas, colores y texturas que tiene. Puedes comprarlo en Amazon por 5,99€.

© iStock
See album

El paso a la alimentación sólida

Otro de los grandes cambios para los bebés durante este trimestre es el paso de la leche materna a la alimentación sólida. Es el momento de ir introduciendo las papillas de frutas (plátano, melocotón, pera o manzana), verduritas (judías verdes, calabaza, calabacín y zanahorias) en caldos o cocidas sin sal, las carnes blancas... Con los caldos vegetales estaremos dando muy pocas calorías al pequeño y en cambio, le aportaremos una gran cantidad de sales minerales, vitaminas y fibra. Concretamente las zanahorias y las patatas son dos de las primeras piezas con las que podremos ir probando su aceptación ya que son no alergizantes.

También podrán comenzar a probar sabores un poco más fuertes como son el de la carne de pollo o la ternera. Pero al principio deberemos introducirla de forma homogénea en su comida, es decir, lo mejor es triturarla y añadirla a su puré. A partir del sexto mes podemos enriquecer el puré con algunos cereales que aumentarán el aporte energético.

Sin embargo, con la leche debes de seguir teniendo mucho cuidado, ya que debe ser bien materna, o bien especial para bebés (leche de fórmula), ya que la normal tiene proteínas que ellos todavía no pueden digerir. Las papillas de cereales se convierten en imprescindibles de los 6 a los 8 meses, junto con su leche habitual. Y a partir de los 8 meses ya puedes darle pasta cocida, pan, yema de huevo duro, queso suave pasteurizado, yogur y legumbres de piel fina como las lentejas o las alubias (pasadas por el pasapurés asegurándonos que no queda ninguna piel).

Es el momento para que el pequeño comience a experimentar con sus propias manos y es probable que comience a coger la comida y llevársela él solito a la boca. Para ir enseñando también buenos hábitos alimenticios es fundamental que él tenga sus propios cubiertos y plato (los hay de materiales seguros) para que empiece a ser más independiente a la hora de comer. Por supuesto, ¡sin dejar de vigilarle ni un minuto! En este sentido, el método Baby Led Weaning puede ser de lo más efectivo a la hora de fomentar a independencia del peque durante las comidas.

Importante: al introducir un alimento nuevo en su dieta debes esperar hasta 3 días para darle otro nuevo. Todos lo que vayas introduciendo tiene que ser de poquito en poquito; una cucharadita para su primera toma de contacto con un alimento es suficiente.

El desarrollo del bebé

Verás que tu bebé está mucho más despierto. Comienza a dar palmas, a mirar y darse cuenta de todo lo que pasa a su alrededor, ya es capaz de coger objetos. Ya puedes alimentarle con cuchara, algo que también te servirá como un juego que divertirá al niño. Descubrirá también que puede producir sonidos, bien haciendo palmas o bien chocando objetos... Deberás jugar con él y ayudarle para que también vaya cogiendo confianza en sí mismo y desarrollando su coordinación. Le encantará que le cantes, le leas algún libro o juguéis con música. Existen muchas vajillas infantiles en el mercado que facilitarán a los pequeños a comer por sí mismos, son de colores y con un diseño más divertido y amigable para ellos. Te recomendamos esta de Jané, la mejor valorada por los clientes.

Descubre: Cuentos infantiles: las mejores historias para niños
© iStock
See album

Como crear hábitos de sueño saludables

Es muy importante que el bebé descanse ya que esto es crucial para su buen desarrollo, tanto psíquico como físico. Podrá dormir hasta unas 15 horas durante el día y por la noche sus sueños serán más duraderos que antes. A partir de los 6 meses tu hijo será consciente de su rutina para dormir. Un baño, un masajito relajante, un cuento... cualquier cosa que hagas será importante porque él la identificará como una actividad a realizar antes de ir a dormir.

Asimismo, es hora de fijar unos horarios y cumplirlos día tras día, de esta forma tu bebé irá acostumbrando su sueño a una misma hora que será la que finalmente su cuerpecito detecte como momento para ir a dormir.

También es hora de que tu bebé vaya dependiendo menos de ti a la hora de quedarse dormido. Debes asegurarte de que se queda dormido él solito y si llora por la noche, no vayas inmediatamente a atenderle. Espera durante unos minutos para ver si realmente le pasa algo con lo que se pueda sentir incómodo.

Estos artículos pueden ayudarte a conseguir que tu hijo se duerma antes y más profundamente:

Los mejores libros de niños ideales para leer antes de dormir
Todo lo que necesitas para ayudar a tus hijos a dormir mejor
Las mejores lámparas de noche para evitar terrores nocturnos en niños

Video por Samanta Mayordomo
NEWS
LETTER
email
Actualidad, tendencias, ocio...¡Y mucho más te espera! ¿Te unes?
Blanca Nieto
Redactora Commerce Blanca Nieto es editora commerce en Enfemenino. Se graduó Traducción y desde entonces ha combinado su pasión por las lenguas y las letras con la comunicación digital y …
Puede interesarte