De todas las posturas del Kamasutra, la sumisión es una de las más sensuales. La mujer se apoya sobre sus brazos y sobre el vientre, con una pierna plegada. El hombre, sobre ella, también se apoya sobre sus brazos en tensión. Él la penetra efectuando un movimiento de vaivén que acentúa el grado de placer cada vez más.
Las ventajas de la postura de la sumisión
La posición de la sumisión es una postura muy cómoda que casi todo el mundo puede experimentar. Por desgracia, si estás embarazada, no te aconsejamos probar esta postura y ¡ya sabes porque! pero te puedes conformar con la clásica (pero tan placentera…) postura del perrito.
La sumisión deja el poder al hombre lo que permite que mientras tu pareja se mueve, te puedes acariciar el pecho o, moviendo un brazo hacia adelante, puedes tocar suavemente tu clítoris, acariciandote.
Para añadir un toque picante y sensual a esta posición, puedes vendarte los ojos para saborear cada movimiento. También puedes crear un ambiente romántico decorando el dormitorio con rosas y velas …
Las posiciones sexuales que se parecen a la postura de la sumisión
¿Te ha gustado probar la postura de la sumisión? Tienes que experimentar la del “Dirty Dancing”... Esta posición le da un significado totalmente nuevo a la expresión “Dirty Dancing”. La mujer está tumbada con la espalda en el suelo (o cualquier otra superficie lisa ¡puede ser la mesa de la cocina!) y con las piernas dobladas para atrás, de forma que las pantorrillas tocan la cara interna de los muslos. Los brazos estarán estirados por encima de la cabeza. El hombre se tumba sobre su pareja con las piernas estiradas y la penetra. Con sus manos puede coger o los hombros, o la cintura de la mujer. Cuando se haya encontrado una posición cómoda para ambos, el hombre podrá estimular a su pareja con movimientos amplios, circulares o con profundas embestidas, dependiendo de las preferencias.
También puedes probar la postura “ascensión a la lujuria” en la que ambos están de pie con los pies firmemente anclados en el suelo. La mujer se pone frente a él pero de espaldas y poco a poco se deja levantar. El hombre la rodea con las piernas y se puede apoyar con los pies en la cama o el sofá. Ahora él puede jugar con la posición del cuerpo de su compañera, aupándola o bajándola. El movimiento debería ser de arriba abajo, rápido y a la vez profundo. ¿Las ventajas de esta variante de la postura de la sumisión? Esta posición sexual permite salir de la cama y puede estar experimentada donde queráis y también puedes probarla si estás embarazada..
En resumen, hay tantas posiciones en el libro del Kamasutra, que siempre tendrás un montón de opciones a tu alcance! Y cuanto más vas a experimentar diferentes posturas, más querrás probar cositas nuevas añadiendo un detalle: una cierta manera de acariciar o mover tu cuerpo, o tal vez llevar lencería fina o porque no usar un juguete sexual para calentar el ambiente... ¡Las variaciones son infinitas, porque la imaginación es infinita!
¿Por qué no te dejes tentar por el bondage? ¡Prueba esta postura para practicar sexo anal! Una postura que da paso a la ternura y las caricias... Una postura sexual increíble para pene pequeño. Dejate llevar por tu pareja: el hombre domina.
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